Google ha anunciado hace poco que en menos de 2 años llegará el fin de las cookies de terceros. Y aunque como usuarios, podría parecernos una muy noble intención que ayudará a proteger nuestros datos: En realidad se trata de una estrategia por parte de Google para controlar la mayor parte del sistema publicitario digital.
Hoy te proponemos conocer un poco más sobre las cookies, y qué consecuencias traerá su eliminación en Chrome.
¿Qué son las cookies en Google?
Las cookies o galletas informáticas son pequeños archivos con información, que se almacena en el navegador del usuario cuando visita un sitio web. En este se suelen guardar las configuraciones y preferencias del usuario, o el estado de la sesión de navegación.
Las cookies están tomando mucha relevancia últimamente debido al anuncio de la ley anticookies, pero realmente muy pocos usuarios saben qué son y cómo funcionan:
Las cookies pueden ser de dos tipos: persistentes y no persistentes. Las primeras tienen un tiempo de expiración, y de no tenerlo, se borran cuando se cierra el navegador.
Las segundas se usan para mantener abierta la sesión del usuario, debido a que el servidor sabe por el identificador de la cookie, a qué usuario pertenece cada sesión abierta.
Su importancia para el usuario radica en:
- La posibilidad de mantener productos en el carrito de compra cuando visitan una tienda online.
- Guardar toda la información útil completada a través de formularios.
- Recordar el idioma, la moneda, la nacionalidad y la ubicación del usuario, para no tener que reconfigurar dichas preferencias cada vez que se visita una web,
- Personalizan el contenido, encontrando lo que deseamos más fácil y rápidamente.
Consecuencias del fin de las cookies de terceros para el marketing
Si bien muchos expertos afirman que, en efecto, los usuarios contarán con una mayor protección de sus datos durante la navegación, dado que solo Google los poseerá.
Sin embargo, estos seguirán circulando: no de forma libre entre terceros, sino simplemente controlados por la empresa estadounidense.
Ahora bien, para el contexto del marketing online, las consecuencias no parecen ser tan halagüeñas según pronósticos:
- Sin las cookies de terceros, no serán posibles las campañas de remarketing: puesto que no se podrá recordar si el usuario ha pasado por una web, de modo que no se le podrá ofrecer un descuento o una oferta que le anime a comprar.
- Aunque aumentará la privacidad del usuario, puede que se le ofrezcan anuncios irrelevantes para sus intereses, de modo que empeorará la calidad de su navegación por Internet.
- Al eliminar un buen por ciento del tráfico de los negocios digitales, previamente dedicado a la inversión en publicidad, Google colocará a los demás actores de la publicidad digital en una gran desventaja: monopolizando la generación y distribución de la información de los usuarios.
- El marketing de afiliación cambiará por completo, adquiriendo relevancia aquellas webs de afiliación por subscripción. Los sitios webs que no creen valor, operarán sin opción de vender sus espacios publicitarios o simplemente desaparezcan.
Los expertos prevén que en el entorno digital se evolucionará a otras formas de analizar el comportamiento de los usuarios en Internet, prescindiendo de las cookies para seguir optimizando las campañas publicitarias en la red.
¿Qué opinión te merece el tema del fin de las cookies? ¿Cuál crees que será la alternativa para los grandes de la publicidad que se verán afectados con esta medida? Déjanos tu opinión en los comentarios.